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Tuesday, January 26, 2016

The Strange Talent of Luther Strode, de Justin Jordan y Tradd Moore

Quien tengan suficiente tiempo leyendo cómics (o posea cómics de décadas pasadas) recordará los característicos anuncios que aparecían en sus contraportadas o en el interior de forros, que ofrecían toda clase de artilugios de dudosa efectividad, desde gafas de rayos X hasta cursos para detectives privados o métodos para aprender a leer la mente. Las versiones traducidas en México por Novaro y Novedades también los incluyeron por mucho tiempo, y uno de los más recordados (no sé si popular, pues no sé de nadie que haya comprado el curso) era el del sistema de Charles Atlas para desarrollar los músculos del cuerpo. Tal vez les sorprenda saber que esos anuncios inspiraron a Justin Jordan para crear este cómic.

Luther Strode es un adolescente como muchos otros, delgado y de apariencia frágil, lo que suele convertirlo en uno de los blancos favoritos de los bullies en su escuela. Tratando de poner fin a los abusos que sufre, Luther compra el Hercules Method, un sistema de desarrollo muscular anunciado en los cómics, esperando que sea la solución a sus problemas. De forma increíble, luego de seguir las instrucciones del libro Luther empieza a desarrollar fuerza, resistencia y reflejos sobrehumanos. ¿Qué se esconde tras la transformación de Luther? ¿De verdad funciona el libro?

Tuesday, January 19, 2016

St. Swithin's Day, de Grant Morrison y Paul Grist

Del mismo modo que pasó en los años sesenta con la música, un par de décadas después los cómics en Norteamérica vivieron su propia Invasión Británica, que llevó a muchos de los autores más talentosos en la historia del medio a trabajar en la industria del cómic estadounidense. St. Swithin's Day, el título que nos ocupa en esta ocasión es obra de un par de esos creadores, pero no vio la luz en América hasta casi diez años después de su publicación original en Gran Bretaña.

Trident era una antología bimestral publicada en el Reino Unido por Trident Comics. Lanzada en 1989, en sus páginas aparecieron trabajos de autores que ya eran conocidos, como Neil Gaiman, Grant Morrison o Eddie Campbell, así como de creadores nuevos, como Mark Millar o Paul Grist. Y fue ahí que se publicó por primera vez St. Swithin's Day, historia dividida en cuatro partes de seis páginas cada una, con tal éxito y aceptación que pocos meses después de que apareció la última parte se publicó una edición con la historia completa totalmente a color.

Tuesday, January 12, 2016

Love Fights, de Andi Watson

No es ningún secreto que soy admirador de muchos autores de cómic que han hecho su carrera alejados de las historias de superhéroes. Y no se trata de renegar del género o de asumir una pose pseudo-intelectualoide como "los cómics de superhéroes son para niños" o algo por el estilo, sino que simplemente encuentro refrescante la diversidad temática en mis lecturas.

De entre esos autores, uno que sin duda merece mayor atención es Andi Watson. Famoso por su trabajo en historias que giran alrededor de personajes comunes en entornos cotidianos, como Breakfast After Noon o Slow News Day, o no tan cotidianos, como en Skeleton Key o Geisha (eventualmente escribiré esas series), Watson no es un creador cuyo nombre suela asociarse con los superhéroes, pero eso no quiere decir que sea ajeno al género, como consta en su historial de trabajo, pues hace unos años fue escritor de Namor para la línea Tsunami de Marvel Comics.

Pero un mejor ejemplo de lo que puede hacer en el género, y sin tener que cambiar su sensibilidad temática o su forma de contar historias lo encontramos en la miniserie Love Fights. Oni Press describe la historia como una mezcla entre Marvels, de Kurt Busiek y Alex Ross, y Serendipity, película protagonizada por Kate Beckinsale y John Cusack; o bien como una versión romántica de Powers. Y la verdad no se me ocurre mejor manera de describir esta historia, que es una comedia romántica en un mundo donde los superhéroes son reales.

Jack y Nora se conocen en el metro, y lo que podría haber sido una historia tradicional de amor a primera vista se convierte en algo completamente distinto cuando su camino es interrumpido de forma violenta por una pelea entre superhéroes y supervillanos. Jack es un dibujante de cómics, encargado de ilustrar las aventuras oficiales de The Flamer, el héroe más grande de Paragon City. Es tímido e inseguro y aunque disfruta su trabajo, no se siente del todo a gusto con él.

Acaba de conocer a una chica que podría ser el amor de su vida, pero no se atreve a invitarla a salir. Su entintador le informa que dejará su trabajo porque le ofrecieron hacer arte completo en una serie publicada por una editorial competidora, y ya no serán equipo. Además, le asignan como nuevo entintador a un sujeto apodado "el carnicero" y su gato lleva días perdido. Pero le queda el consuelo de que podría estar peor.

Por su parte, Nora trabaja como asistente editorial en un tabloide que se especializa en chismes sobre superhéroes, aunque muere por recibir la oportunidad de escribir por su cuenta y convertirse en reportera.

Y ahora que conoció a un chico agradable, junto con él se presenta la oportunidad de conseguir su sueño. Lo único que tiene que hacer para lograrlo es destruir la reputación de The Flamer y terminar con su carrera. El único problema es que, en el proceso, muy probablemente vaya a destruir también la de Jack. Así que ahora debe decidir entre perseguir su sueño profesional, o buscar la felicidad.

El arte de Watson sólo puede describirse como minimalista. Su estilo mezcla un diseño propio del manga de acción con el trazo limpio y firme de algunos caricaturistas europeos. Además, un inteligente uso de grises le permite recrear un mundo que resulta realista y fantástico a la vez. Ya sea que se trate de escenas tan comunes como dos personas caminando por la calle o sentadas en un café, o de algo fantástico como el escondite secreto de un héroe o secuencias de acción con tintes épicos-heroicos, su trabajo siempre es claro y fácil de seguir.

La historia de Love Fights resulta engañosamente simple. El centro argumental es la relación entre Jack y Nora, pero el trasfondo presenta un par de tramas secundarias muy entretenidas. En el caso de los fans de superhéroes, creo que encontrarán muy atractiva la forma en que se resuelve la desaparición de Guthrie, el gato de Jack, o la investigación documental de los archivos de la Edad de Plata y la Edad Oscura de los cómics de The Flamer en busca de pistas para resolver el misterio que puede lanzar la carrera de Nora.

Love Fights es una lectura recomendada tanto para fans de superhéroes como para quienes no tengan interés alguno en el género, lo que sólo es posible gracias al uso de temas universales como el amor, la amistad o el honor. Publicada originalmente como una miniserie de doce números, fue recopilada en dos tomos. No es tan difícil encontrarla en cualquiera de los dos formatos, pero puede que requiera algo de persistencia. Aún así, les garantizo que vale la pena.

LOVE FIGHTS
Historia y Arte: Andi Watson
Editado por: Oni Press, 2003-2004.
Formato: 12 números formato estándar, blanco y negro.
Colección: 2 tomos formato pocket.

Texto originalmente publicado en La Covacha Mx
sobre una versión previa publicada en Comicverso

Monday, January 4, 2016

Strangers in Paradise, de Terry Moore

sobre una versión previa publicada en Comicverso

Strangers in Paradise es una historia que tiene como protagonistas a dos mujeres y un hombre, y ninguno de ellos parece modelo de bikinis o ropa interior, algo impensable en la escena comiquera de la primera mitad de los noventa, cuando dio inicio esta serie.


No hay superhéroes (excepto por una secuencia de sueño ilustrada por Jim Lee que sirvió para dar al título la bienvenida a Image), ni supervillanos o mafio... eh, bueno, mafiosos y criminales, sí. También policías. Y un músico y una escritora, y algunos números suceden en el futuro. Pero me estoy desviando del tema.

SiP cuenta la historia de Katina "Katchoo" Chovansky, Francine Peters y David Qin. Katchoo está enamorada de Francine, Francine cree estar enamorada de Freddie y luego de Brad, pero en realidad no ama a ninguno de los dos. David está enamorado de Katchoo, y Katchoo ama a David. Y sí, su relación es tan complicada como se lee, y cualquier parecido con la vida real sólo ayuda a hacer de ésta una serie todavía más humana y entrañable. SiP trata sobre seres humanos y sus relaciones personales, y es una historia de amor y sacrificio sazonada con cuanta cosa Terry Moore pudo incluir en ella.

La primera miniserie es casi una comedia romántica. David conoce a Katchoo y se siente atraído por ella, así que hace hasta lo imposible por entrar en su vida y de paso en la de Francine. Francine sale con Freddie, pero éste no está interesado en una relación estable y sólo busca sexo. Francine no está dispuesta a llevar una relación así y Freddie la bota, provocando la ira de Katchoo, a quien Moore ha descrito en más de una ocasión como "la original rubia enfadada". Sólo la intervención de David impide que Katchoo haga algo de lo que pueda arrepentirse, pero eso no significa que Freddie se libre de su venganza.


El volumen 2 cambia el tono de la historia, introduciendo elementos de intriga y misterio propios de un thriller o novela policíaca, pues al revelarse el pasado de Katchoo descubrimos que no todo es como parece. Casas de citas, intriga política, asesinas profesionales, un detective honesto, y la aparición de la madre de Francine son algunos de los elementos que ayudan a que la historia desarrolle una complejidad y profundidad difíciles de encontrar en el mercado del comic norteamericano hasta hace pocos años.

Moore no teme a experimentar con su trabajo, y menos en su faceta de escritor. Además del arte secuencial, en distintos pasajes recurre a narrar en prosa, como si fuese un extracto de una novela, o en formato de guión teatral. También entiende cuando el silencio se convierte en una poderosa herramienta narrativa, y lo utiliza con maestría, apoyándose en su talento como artista gráfico. Incluso utiliza letras de canciones y poemas para contar su historia, y los resultados son extraordinarios.

Una de las características principales de la obra de Moore es la forma en que escribe y dibuja a sus personajes. No sólo se ven distintos unos de otros (algo especialmente complicado en una publicación en blanco y negro), sino que cada uno tiene personalidad propia y no buscan llenar ninguna clase de estereotipo. Son personas como cualquiera, con sentimientos y problemas, con virtudes y defectos, quienes pueden estar de buen humor, o tristes, y cambiar de estado de ánimo dependiendo de la situación en que se encuentren.


Esa cualidad permitió a la serie convertirse en algo en su momento único en este medio: un título leído por casi tantas mujeres como hombres, si no es que más. Además de atraer a un público femenino, SiP representa también un punto de entrada ideal para lectores que no saben que el cómic puede ser mucho más que héroes en mallas. No sé si sea para todos los gustos, pero de algo estoy seguro: Si alguna vez han pensado en invitar a su novia, a una amiga, hermana, prima o conocida a intentar leer un cómic, Strangers in Paradise es su mejor apuesta.

Y lo mismo va para ese amigo o pariente que tiene prejuicios contra el medio. A estas alturas es casi un cliché hablar de un cómic 'para quienes no leen cómics', pero esa es una descripción que Strangers in Paradise llenó al pie de la letra durante mucho tiempo. Y lo mejor de todo es que es también un cómic que un lector regular puede disfrutar sin problema alguno.


STRANGERS IN PARADISE
Escritor y Artista: Terry Moore
Editoriales: Antarctic Press / Abstract Studios / Image Comics (Homage)

Fecha de publicación: 1993 a 2007

Formato: 107 números standard de 32 páginas blanco y negro.
Colecciones: 19 tomos de pasta blanda, 10 tomos de pasta dura, 6 tomos tamaño pocket. Edición Omnibus en dos tomos con las más de 2000 páginas de la historia.